Llegar a Anguita en Semana Santa
Lo primero que se encuentra el viajero es la ermita de la Soledad, una construcción realizada a expensas de la Cofradía de la Vera-Cruz en el siglo XVII. De planta cuadrada, construida en sillar rojizo de rodezno, y ya sin el tejaroz que de antaño protegía sus puertas, hoy destaca en su fachada el doble ingreso, que es tan típico de las ermitas “de la Soledad” que a lo largo de los siglos se han construido por tierras de la Alcarria y las Serranías. Esta de Anguita es una de las elegantes y grandiosas, todo un ejemplo de edificio popular, religioso y tradicional. Hay que dar muchas vueltas por esta provincia para encontrar otra ermita otra ermita, de las de “doble puerta” tan espectacular. Hace algún tiempo, cuando la daba el sol en la cara, hicimos esta fotografía que acompaña al comentario. Creo que puede servir de ejemplo paradigmático de cuanto digo.
Lo primero que se encuentra el viajero es la ermita de la Soledad, una construcción realizada a expensas de la Cofradía de la Vera-Cruz en el siglo XVII. De planta cuadrada, construida en sillar rojizo de rodezno, y ya sin el tejaroz que de antaño protegía sus puertas, hoy destaca en su fachada el doble ingreso, que es tan típico de las ermitas “de la Soledad” que a lo largo de los siglos se han construido por tierras de la Alcarria y las Serranías. Esta de Anguita es una de las elegantes y grandiosas, todo un ejemplo de edificio popular, religioso y tradicional. Hay que dar muchas vueltas por esta provincia para encontrar otra ermita otra ermita, de las de “doble puerta” tan espectacular. Hace algún tiempo, cuando la daba el sol en la cara, hicimos esta fotografía que acompaña al comentario. Creo que puede servir de ejemplo paradigmático de cuanto digo.
En estos días de Semana Santa, la ermita de la Soledad de Anguita tiene además otra misión: de aquí salen las imágenes de los pasos que recorren las calles del pueblo en sus procesiones. Aquí está depositado todo el año, y de aquí sale, el cuerpo tallado en madera de Cristo Yacente, o Cristo del Sepulcro, espectacular y dignísimo en su talla y policromía: quizás la pieza escultórica más antigua de Anguita.
El resto de los pasos que de aquí salen son el Cristo Crucificado, “el enclavado”, el Cristo atado a la columna, la escena de La Oración en el huerto y Jesús con la Cruz a cuestas. Finalmente, sale la imagen de la virgen de la Soledad, que es llevada a hombros de mujeres. En la tarde del Viernes Santo tiene lugar esta “procesión del Entierro” que invito a contemplar por tratarse de uno de los testimonios más sencillos y ejemplares de la Semana Santa castellana rural.
Además, tiene lugar en Anguita en estos días el “Vía Crucis” que partiendo desde esta ermita de La Soledad discurre con devoción de todos cuantos lo forman hasta el lugar de “El Calvario”, siguiendo un rastro de cruces de hierro sobre plintos de piedra que marcan el camino de la devoción y la penitencia. Un lugar, Anguita, y una fecha, la Semana Santa, que merece ser conocida.
2 comentarios:
Ciertamente... la ermita de la Soledad es una de las más "especiales" de toda la región. Sus dimensiones, y construcción, se asemejan bastante a las del humilladero de Medinaceli. No sería de extrañar que la influencia entre ambas fuera determinante.
Siempre es un placer leerte Maestro ;-)
comparar con la de Medinaceli:
http://www.flickr.com/photos/pgutierrez/3012038959/
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